Las historias de las siguientes cuatro niñas demuestran cómo la edad no es un límite para innovar.
Hannah
Herbst
(EE.UU.)
Hannah Herbst
A los 13 años Hannah ideó un dispositivo para convertir las olas del océano en electricidad, inspirada en su amiga por correspondencia de África Subsahariana, donde muchas personas tienen poco acceso a electricidad constante.
Así nació su proyecto Bringing Electricity Access to Countries through Ocean Energy (BEACON), con el que ganó el:
Discovery Education 3M Young Scientist Challenge
EN 2015
Guadalupe
Cruz López
(México)
Calentador solar
Xóchitl Cruz
A los 8 años Xóchitl inventó un calentador de agua solar de bajo costo, hecho con objetos reciclados como botellas de agua y conectores de plástico.
EN 2018
Yang
(EE.UU.)
Una aplicación para recordar
Emma Yang
Queriendo ayudar a quienes padecen Alzheimer, como su abuela, a conservar sus recuerdos, creó la aplicación Timeless cuando tenía tan solo 12 años.
EN el 2015
Esther
Recinos
(Guatemala)
Gloria Recinos
La niña inventora, como se le conoce en Guatemala, inventó un robot de rescate después de que un alud sepultara a centenares de personas en su país.