Las marcas no solo identifican productos y/o servicios: construyen confianza, reputación y vínculos emocionales con los consumidores. Un portafolio marcario sólido puede ser clave para mantener el liderazgo en mercados altamente competitivos. Este es el caso de Bavaria, la histórica cervecera colombiana que, gracias a la fuerza de sus marcas, domina ampliamente el mercado de cervezas en el país.
En nuestra firma, nos importa mucho lo que hacen nuestros clientes y entendemos que las marcas no son sólo instrumentos jurídicos, sino que representan la identidad, los valores y la visión de la empresa.
Bavaria ha consolidado un portafolio que combina tradición y modernidad, con marcas como Águila, Poker, Club Colombia, Pilsen y Corona. Esta diversidad le permite llegar a distintos públicos, contextos y ocasiones de consumo, desde reuniones informales hasta celebraciones especiales.
De acuerdo con un reciente estudio de YanHaas y Dinero, sus marcas lideran los niveles de recordación en el país: Águila encabeza el ranking con un 33% de recordación, seguida por Poker (26%), Pilsen (5%) y Club Colombia (4%).
La estrategia de Bavaria ha consistido en construir identidades de marca claras, con mensajes que resuenan en la vida cotidiana de los consumidores colombianos. Además, la empresa ha sabido innovar sin perder su esencia, renovando su portafolio y adaptándose a las tendencias del mercado, sin dejar de promover un mensaje clave: el consumo responsable.
El caso de Bavaria demuestra cómo las marcas, cuando están bien gestionadas, se convierten en activos intangibles de gran valor. Más allá del producto, lo que se vende es una experiencia, una identificación cultural y una promesa de calidad.
